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jueves, 5 de mayo de 2011

VOLVER A HABLAR

Puerta del obispo de entrada a la Catedral
Observando estas imágenes de nuestra antigua catedral comprendemos que con los tiempos todo está obligado a cambiar, así como nuestros hábitos. Me imagino que esta fuera la Puerta del Obispo, mas desapareció, como también nosotros hemos de cambiar nuestra ubicación en la sociedad,  en este mundo de continua adaptación para  no desaparecer.
Hoy voy a intentar situarme en aquellas fechas en que hube de adaptarme a la nueva situación.
                      Bien, pues a los diez días de operarme, afortunadamente pude empezar a tomar agua, y a continuación intenté comer una sopa de momento, siendo también satisfactorio. Adiós a la sonda (Gracias a Dios). Pienso que mi fuerza de voluntad, caminando cuanto me era posible, abusando también de la paciencia de mi padre, pues ya se cansaba más que yo de dar vueltas de una punta a otra, caminando de un hospital  a otro,  así como mis hermanas siempre pendientes de ayudarme a humidificar la tráquea.
                  Consideré importante cuidar lo mas posible la higiene duchándome al levantarme todos los días  lo cual supongo ayudara que a los quince días de operado me dieran el alta en hospital. Tuve la suerte de no tener complicaciones de fistulas creo se llaman, que al parecer consisten en una comunicación de alguna parte de la zona afectada, haciendo pasar el agua o la comida hacia donde no debe, pudiendo creo ir al pulmón, o también según me contaba el otro día un operado de Murcia, puede comunicar el cuello con el exterior, y después de visitar varios médicos, supongo que otorrinos de su ciudad  pidió consejo sobre cómo poder evitarlo.

                     Pero ahora lo mas importante ha de ser contactar con una asociación que me han dicho puede enseñarme a hablar con voz esofágica, y así me lo planteo. Acompañado de mi padre llegué a la sede de ALLE, donde fui recibido como uno más, hasta el extremo que el monitor, Carlos se llama, ( debe de ser el último descendiente del Santo Job, a juzgar por su santa paciencia con nosotros) me riñó por no pronunciar un monosílabo cuando solo llevaba dos días de asistencia, lo cual él ignoraba al haberse tenido que ausentar en esos días.
                  Enseguida me sentí identificado con los nuevos compañeros, observando una buena organización por parte de los monitores que hacen un trabajo desinteresado, además de encontrarme con asesoramiento de un médico foniatra, una logopeda, una psicóloga, un trabajador social y sobre todo unas buenas personas siempre dispuestas a ayudar.
                  Y así, con tragos de agua con gas y muchas ganas, conseguí emitir mi primer sonido para mas tarde ir sacando alguna palabra corta y fácil como can, casa, coto, pato.......          
                 Y es que el laringectomizado es una persona que ha sufrido una extirpación parcial o total de la laringe, en general debido a un cáncer. Debido a ello el laringectomizado parcial produce el sonido al unir una cuerda vocal con la banda ventricular contranatural pues solo le falta una de las dos cuerdas y conservando la laringe, mientras el total ha de aprender a producir el sonido en el esfínter situado en la parte superior del esófago, llamado esfínter esofágico superior o boca esofágica, pues habrá perdido por completo la laringe. O sea, que el aire precisado para hablar o cantar lo ha de deglutir, pues el aire pulmonar ya solo sirve para respirar.
                Con el tiempo ya iba pronunciando números del uno al diez al principio, los días de la semana, mi nombre, apellidos y dirección, etc.  Me ilusionó mucho poder llamar por primera vez "Ana, Nieves, papá, mamá" y también alguna palabrota fáciles de pronunciar, mas no veía el día en que pudiera hilvanar una frase completa, pues también hay que aprender a controlar el aire, ya que solo disponemos de un litro y lo normal son cinco; pero ese día llegará.
              Siempre recordaré una mañana antes de clase, tomando café cerca de la asociación que me comentó la dama que atendía sobre su suegro laringectomizado, que murió, pero no por la operación en sí, sinó de pena al no poder hablar, lo que me quedó muy grabado en la mente. Casualmente hace dos días llegó un e-mail a la asociación de un operado de Murcia pidiendo le dieran cualquier solución, a cualquier precio, aunque fuera una prótesis con sonido metálico, lo que fuera. !Qué triste leer a ese hombre, y que don tan preciado es la voz¡
plaza de Guzman
               Hoy no doy más tabarra, me quedo pensando se me abran nuevas puertas, y hablando de puertas os dejo una imagen de cómo era Guzmán a la entrada de Ordoño II como fondo

    

comienzo de Ordoño II desde plaza Guzman






miércoles, 27 de abril de 2011

OTRO SISTEMA DE VIDA

Llevo 43 meses operado de laringe. En verdad es muy duro volver a empezar, pues después de la operación, al salir de quirófanos y despertar de la anestesia en la UCI  lo primero que observas es que no tienes voz y el aire se te va por el estoma, o traqueotomía.

                     Bien, ahora se trata de situarte de nuevo en este mundo y empiezas a observar a tu alrededor, miras hacia tus familiares y te dicen que todo a ido muy bien, que te vas a recuperar y esperas escuchar que no ha sido tan grave y que podrás hablar al día siguiente, o tal vez en un par de semanas.

                   Vienen a visitarme al hospital y no tengo fuerzas, pero a los dos días comprendo que solo se sale adelante luchando, me levanto llevando la bolsa de drenaje cogida de la mano y consigo llegar a mitad de camino del largo pasillo que hay entre Virgen Blanca y Princesa Sofía, pero me canso mucho y vuelvo a mí habitación.        Cada día que pasa noto progreso, aunque me gustaría comer normalmente, pero ha de ser a través de una sonda directa al estómago introducida por la nariz.         La sonda fue un problema, dado que una vez se salió debido a un tirón y hubieron de llevarme a rayos X al volver a introducirla, pues corría  peligro de pasarse al pulmón y no al estómago, pero la enfermera se portó de maravilla.
               
              Otra  anécdota  importante fue que supongo a consecuencia de la pérdida de sangre sufrida en la operación y siguientes análisis a las dos o tres noches me dieron fuertes dolores de pecho que me hacían
saltar notando un fuerte toc...toc...toc.... procedente del corazón.       Aguanté  los fuertes dolores toda la noche, pues el doctor y la enfermera de guardia no supieron la procedencia del problema y yo pensaba para mi que iba a sucumbir de infarto o algo similar.          A la tarde siguiente estando con mi familia me volvió a ocurrir y ya llamaron a los cardiólogos que después de observarme detenidamente diagnosticaron  ´la falta de sangre, por lo cual me pusieron una bolsa a la que con buen humor denominaron "jamón" en vena, con lo cual no volvió a ocurrir.                  
                    Y así transcurrieron 15 largos días hasta poder alimentarme por la boca  y volver a casa a empezar la nueva vida que se venía encima.

                  Como su pongo leerán esto  otras personas a quienes ocurriera lo mismo, seguiré en otra entrada contando las experiencias tenidas a partir de ahora.

                Ánimo a los nuevos operados y tened en cuenta que la vida es bonita y vale la pena vivirla.